Etapa 2
El Wat Chedi Luang y el Wat Phan Tao, fueron, a mi gusto,
lo que tenían una energía más especial.
Después de un demasiado largo trayecto en bus llegamos a Chiang
Mai.
Chiang Mai es una pequeña y tranquila ciudad al norte de
Tailandia. Aunque el sol es muy fuerte, el clima es muy agradable, nada que ver
con Bangkok.
El centro histórico de Chiang Mai es un cuadrado de 2 x 2
km, rodeado de canales.
Para alojarse lo ideal es hacerlo en el centro histórico.
Los templos más importantes están aquí. Además el centro histórico es como si
estuviera aislado del los alrededores muchos más caóticos.
Chiang Mai es básicamente la ciudad de los templos, tiene
más de 300 templos budistas, y aunque los templos son la parte más atractiva
para el turista, hay muchas más cosas que te permiten disfrutar de la ciudad.
Nosotros nos quedamos solo dos días, pero nos hubiéramos quedado más tiempo.
El ambiente de la Chiang Mai es muy agradable y tranquilo, es un placer pasear por sus calles y disfrutar de sus locales y comida. La gente es muy amable, sonriente, y se mueven en bicicleta y Tuk-tuk. Además hay muchas pensiones familiares rodeadas de jardines y flores.
El ambiente de la Chiang Mai es muy agradable y tranquilo, es un placer pasear por sus calles y disfrutar de sus locales y comida. La gente es muy amable, sonriente, y se mueven en bicicleta y Tuk-tuk. Además hay muchas pensiones familiares rodeadas de jardines y flores.
Uno de los restaurantes que más nos gustó en Chiang Mai
fue el Dada Kafe, un lugar de comida y zumos naturales, aunque en toda la
ciudad se come fenomenal.
El recorrido de los templo nosotros lo hicimos en un día. Los Templos son muchos y aunque son diferentes uno del otro, en general son muy
parecidos.
Eso sí, los templos de Chiang Mai fueron los que más energía positiva me
trasmitieron y los más agradables de todo el viaje. Cuando entras en
ellos enseguida captaba su energía y te entran ganas de quedarte a meditar.
En todos los templos hay que entrar descalzo, lo mejor es
pasear en zapatilla, para podérsela quitar cómodamente.
El día lo pasamos paseando por la ciudad pasando de un
templo a otro, hasta llegar a la teórica estrella de los templos de Chiang Mai,
el Wat Phra Singh. Aquí está la imagen del buda más importante de la ciudad.
También es interesante pasear por las zonas que rodean
los templos, donde se alojan los monjes, son zonas de jardines muy bonitas.
Además de los templos en Chiang Mai se puede aprovechar el tiempo yendo a cursos de cocinas, de meditación, etc. o disfrutando de placenteros masajes Tailandeses.
Además de los templos en Chiang Mai se puede aprovechar el tiempo yendo a cursos de cocinas, de meditación, etc. o disfrutando de placenteros masajes Tailandeses.
Nosotros pudimos disfrutar de un masaje Tailandés de 2
horas, con sauna con hierbas aromáticas, luego masaje tradicional y para
terminar masaje con aceite aromático. Salimos como nuevos.
Otro lugar interesante de Chiang Mai es el Mercado Nocturno. Lo hacen poco fuera de la Zona Este del centro. El mercado es muy bonito, y sobre todo no te acosan queriendo venderte todo lo que tienen. La pena fue que fuimos al principio del viaje, y no queríamos cargar con cosas... porque los precios estaban muy bien, además eran cosas que luego no encontramos más en otras partes. Bangkok es más caro y no se encuentra artesanía como la que se puede comprar en los lugares tradicionales o más rurales.
Otro lugar interesante de Chiang Mai es el Mercado Nocturno. Lo hacen poco fuera de la Zona Este del centro. El mercado es muy bonito, y sobre todo no te acosan queriendo venderte todo lo que tienen. La pena fue que fuimos al principio del viaje, y no queríamos cargar con cosas... porque los precios estaban muy bien, además eran cosas que luego no encontramos más en otras partes. Bangkok es más caro y no se encuentra artesanía como la que se puede comprar en los lugares tradicionales o más rurales.
Nos encantó Chiang Mai, estuvimos muy bien en los días pasados aquí y pudimos descansar... pero el recorrido tenía que
seguir,,, nueva meta la frontera con Laos.
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