Argentina, Buenos Aires

Etapa 13
Al final llegó la hora de dejar Puerto Iguazú. Por la mañana nos preparamos para nuestro nuevo destino, Buenos Aires.

Esta vez, ya cansados de muchas horas de colectivo, y por falta de tiempo, decidimos coger un avión. Después de desayunar tranquilamente, y después de dar una última vuelta al gracioso pueblo, nos dirigimos hacia el aeropuerto.

El avión salió en horario, y en poco tiempo llegamos a Buenos Aires.

El día era bonito, con sol y calor. Llegamos al hostal. Era un sitio muy … diferente, pintoresco … El Hostal Sol tenía las paredes amarillas y verdes, con un patio grande y luminoso. El ambiente era relajado, con gente que iba y venía. Tenían varios talleres, uno de ellos era de tango. Estaba en una zona céntrica, al lado de los barrios de San Telmo y de La Boca.

Ahora, nos quedaban los últimos 2 días y medio para visitar  la gran capital Buenos Aires.

La ciudad es bastante caótica, mucha gente y mucho tráfico caótico típico de Argentina. Se parece a una mezcla entre varias ciudades europeas con un toque latino.


El primer paseo lo dimos en el barrio de San Telmo. La cosa más interesante que encontramos en este barrio fueron los locales, bares y sitios para comer. Puedes encontrar sitios muy auténticos que te llevan atrás en el tiempo y con sabor a tango.


El segundo día estábamos decididos a ver el mayor número de cosas posibles de la ciudad, pero un contratiempo debido a algo que desayunamos, me provocó vomito, colitis y fiebre. Así que pasé dodo el día tirado en la cama y descansando y perdiendo uno de los últimos días que me quedaban.

Nos quedaba el último día, un sábado…


Agobiados porque aún no habíamos visto prácticamente nada de Buenos Aires, y también con el miedo de que me volviesen los ataques de colitis, salimos buscando una ruta para intentar conocer lo más importante de esta ciudad.


Primera etapa del día el barrio de La Boca. El barrio era muy bonito, con casas de colores, había una feria con artesanía cerca del puerto. Por todas partes había espectáculos de tango. La Boca es un barrio vivo, alegre, pero estudiado para los turistas. Después de almorzar en uno de los centenares de sitios para comer nos dirigimos hacia el barrio de Recoleta.

Recoleta es un barrio totalmente diferente de La Boca. Es más pijo, había muchas tiendas de ropa, de moda, bares de diseño. Por ser sábado, montaron una feria de artesanía. Era enorme y había de todo. Entramos en el famoso cementerio de Recoleta, famoso por sus monumentos.

Descansamos un poco tomando un té y un alfajor Havana en un bar y luego con un taxi nos dirigimos hacia el barrio de Palermo. Esta zona es un poco diferente.
El barrio de Palermo es un barrio antiguo, de poca importancia, pero, en los últimos años empezó a crecer gracias a sus bares y tiendas de tendencia. Los comerciantes se movieron hacia este lugar porque es más económico,  y ahora se ha convertido en uno de los barrios de tendencia alternativa para los porteños. Había muchísima gente, sobre todo jóvenes, paseando y comprando en las multitudes de tiendas o puestitos artesanales. Pasear por el barrio de Palermo resulta agradable, aunque a veces agobiante por la cantidad de gente que hay.

Nos quedamos a cenar en este barrio y luego volvimos al hostal.
Al día siguiente teníamos que coger un avión para volver a casa.

Una nota sobre la comida de Buenos Aires.
Por esta ciudad pasé tres veces quedándome un total de cuatro días aproximados durante el largo recorrido del país. Me hablaron muy bien de la comida de Buenos Aires, y estoy seguro de que en algún lado se comerá bien… pero yo, por desgracia, no tuve la oportunidad de hacerlo. Quiero imaginar que los sitios que me aconsejaron no estaban a la altura de mis expectativas. Aparte las fantásticas empanadillas, por el resto comí mucho mejor en el resto del país.
Lo peor que comí en esta ciudad fueron las pizzas, y estuve en el sitio que me nombraron como el mejor de Buenos Aires. A lo mejor por ser italiano estoy acostumbrado a otra calidad de pizzas. Aunque tengo que decir que la mejor pizza que comí en todo el país, la comí en el pequeño pueblo de Puerto Pirámide, en la península de Valdés.

Anterior - Etapa

2 comentarios:

  1. yo vivo en uno de los departamentos en Recoleta. no voy muy seguido a la boca, pero es hermoso todo sus colores y formas. la verdad muy Argentino!!

    ResponderEliminar
  2. En el barrio de San telmo, te puedo recomendar agunos sitios estupendos para comer y a buen precio. Nosotros estuvimos en Octubre pasado y volvimos encantados.

    ResponderEliminar